Los refugios de animales realizan un trabajo tremendo rehabilitando perros. Algunos animales llegan a los refugios en condiciones espantosas, sin embargo, los voluntarios siguen adelante para brindarles el amor y cuidado que necesitan.
Ese fue el caso de Libby, una perra con un tᴜmoг del tamaño de un balón de vóleibol. Pero su historia ahora tiene un final feliz.
La Sociedad Humanitaria para Tacoma y el Condado de Pierce en el estado de Washington acogió a Libby, una pitbull callejera, en agosto. La perra fue descrita como “llena de vida” con una “cara dulce y ojos amables”.
Sin embargo, Libby tenía un problema médico significativo: un tᴜmoг de 10 libras del tamaño de un balón de vóleibol, uno de los tumores más grandes que habían visto:
Libby llegó en un período ocupado para el refugio: según HSTPC, ella fue uno de los tres casos urgentes a los que respondieron en 48 horas, y siendo el refugio de ingresos más grande de Washington, docenas de nuevos animales llegaban todos los días.
A pesar de esto, prometieron ofrecerle a Libby el mejor cuidado posible, aunque no tenían idea de lo que el futuro de la pobre perra deparaba.
“Ella merece el cuidado más compasivo posible, pero no sabemos cuál será su resultado en este momento”, dijo el refugio en un comunicado de agosto. “Nuestro equipo veterinario está considerando todas las opciones posibles, comenzando con pruebas para determinar el tipo de tᴜmoг que tiene Libby”. Por el momento, está recibiendo medicamentos para aliviar su malestar, así como amor interminable de nuestro personal”.
Después de tomar una radiografía de Libby, descubrieron que el tᴜmoг estaba en el hueso de su pierna derecha superior, lo que requería amputación. La inflamación reactiva hizo que el tᴜmoг se expandiera a su tamaño anormal, causándole un dolor insoportable.
El refugio pudo pagar la amputación de la extremidad de Libby gracias a generosas donaciones de partidarios. El procedimiento, realizado por los veterinarios en BluePearl Pet һoѕріtаɩ, fue un éxito, y Libby ya no estaba incómoda.
Tristemente, a pesar de que su tᴜmoг había sido eliminado, le diagnosticaron cáncer óseo agresivo, y su tiempo en la tierra podría ser limitado. ¡Pero hay buenas noticias: Libby ha encontrado un hogar!
Una técnica veterinaria se enamoró de Libby y aceptó adoptarla, según HSTPC. Aunque sabía que Libby no viviría mucho tiempo, quería llenar sus últimos días de amor.
“Hay algo en sus ojos que ruega por amor y seguridad”, afirmó su nueva adoptante en Facebook. “No pude apartar la mirada de eso”.
Libby ha sido renombrada como “Wiggles” y está disfrutando de su nuevo hogar, jugando con su hermano perruno y su familia, y echando la siesta en el sofá.
“Aunque no estamos seguros de cuánto tiempo le queda, sabemos que pasará sus últimos días rodeada de amor y comodidad gracias a la amabilidad de nuestra comunidad”, declaró la Sociedad Humanitaria.